El doctor Collins le había anunciado que la intervención duraría dos horas y que sería realizada por él mismo. La linda aspirante a modelo se había dado a la tarea de perfeccionar sus curvilíneas para ir en busca de la fama por las pasarelas de lencería.
Dos días después, Alysson entró en el quirófano, no sabía si saldría de allí con vida. Sin embargo, la obsesión de alcanzar la perfección entendida como belleza insuperable, la llevó quizá, no contenta a tener que jugársela con el bisturí, pero si de sentirse bastante ilusionada.
- Todo saldrá bien, ¿me oyes? tranquilízate. - dijo el anestesista.
Bajo aquella gélida iluminación y antes de embarcarse en el viaje de la anestesia, recordó las palabras de su amiga:
- Cuando despiertes tendrás una nueva imagen. - Sintió que los ojos se le llenaron de lágrimas por la felicidad.
En la operación, Alysson se desconectó de su hilo de plata y perdió su alma. Es entonces que, otra alma proveniente de la región de la Andrómeda logró entrar a su cuerpo físico, asumiendo su personalidad. Era el único camino para los obeliscos de poder entrar dentro del holograma terrenal.
Hoy en día, la supuesta Alysson es una más de las muchas espías que trabajan en puestos claves de control e información, para luego pasarlos al Consejo de los Nyxo Morfos, la raza más violenta y cruel del espacio.
¿Hay alguien por ahí que desee una cirugía estética gratis?
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