- No tendrás miedo, verdad? - preguntó Mistoffelees, sacando una caja de cerillos para encender las velas de un candelabro..
- !No! respondí, oculta detrás de su negra capa de terciopelo.
- Pasa. - dijo. Las puertas metálicas se abrieron por fin, chirriando. Mis pasos resonaron sobre las anchas losas, sentí el aire pesado, un olor fuerte a nardos y azucenas me recordaron fugazmente la tumba de mi abuela. Sus ojos pardos seguían curiosamente mirando hacia sus costados; al fondo había un enorme pedestal rodeado con columnas y estatuas de mármol, donde descansaba un bello ataúd de un hermoso y brillante metal. Me acerqué lentamente al cubículo fúnebre, y lo observe detalladamente, tuve ganas de tocarlo pero fue más fuerte el miedo que mi curiosidad; ya que, de tan solo mirarlo, un escalofrío recorrió toda mi piel.
¿Acaso estaré soñando y...? Un ligero graznido atrajo mi atención y las sombras parecían reír a lo lejos.
EDITANDO...
¡Gracias por leer! ¡Nos vemos en la siguiente entrada!
♥♥♥
Fascinante, me ha encantado. Besos :D
ReplyDeleteSuch a cool start. Yes, ready for more!
ReplyDeleteWonderful descriptions!
ReplyDeleteMe ha picado la curiosidad... ¿Subirás más? :3
ReplyDelete¡Nos leemos!
¡Hola!
ReplyDeleteMe has dejado con la intriga🤩.
¡Lo espero completo! ¡Un beso!